Nuestros mayores lo tienen claro:
Frente al uso partidista de las izquierdas, cuyas tropas cibernéticas les insultaban y denigraban tras las últimas elecciones por considerarles culpables de la victoria derechista según las encuestas de voto. Los mismos que veían bien limitar el voto a electores de 16 a 45 años de edad. Los mismos que mantienen y alimentan un modelo de Estado autonómico ruinoso insoportable. Los mismos que hoy les piensan utilizar detrás de la pancarta para sacar tajada política.
Frente al abuso vergonzante de las derechas, cuyas políticas antisociales harán recaer sobre sus espaldas el esfuerzo que supone cuadrar unas cuentas imposibles por la mala gestión, el dispendio, el fraude fiscal, la corrupción y la falta de trabajo de calidad con salarios decentes que llenen las arcas públicas con las cotizaciones necesarias. Los mismos, repetimos, que también mantienen y alimentan un modelo de Estado autonómico ruinoso e irracional.
Por todo ello pueden contar con Defensa Social para velar por la protección de sus derechos e intereses
